jueves, 17 de junio de 2010

CANUTO O MACARRÓN


La nacional 634 que comunica Asturias con Galicia y viceversa adolece de prostatismo y le han practicado una resección a lo bestia. Con dinamita, oiga. Resulta que los listos que diseñaron esta carretera no se les ocurre otra cosa que interrumpir el fluvial curso del río Barayo instalando un canuto y un macarrón para drenar las aguas de una parte y pasarlas a la otra. Claro, eso ye más barato que hacer un puente, que ye lo que teníen que haber hecho. Con lo fácil que ye. Mira que yos lo dijeron los paisanos de El Bao, el pueblu más cercanu a la carretera, “facer un puente, que eses tuberíes van a atascase”, y no son ingenieros. Pués nada, ni casu. “Vais decímelo a mí que estudié en la Complutense y soy el expertu. Lo que yo te diga”. Y con lo que yo te diga tiraron hasta que llegó la Gota Fría de junio, mandó el canuto y el macarrón a tomar por saco y armose allí la de dios. Un regatu poco mayor que una mexá causó los mismos efectos que el Ebro o el Amazonas si hubieran pasáo por allí, con les cases sumergíes hasta la chimenea y los paisanos y paisanes de allí tirándose de los pelos y cagándose en to los muertos del ingeniero, la empresa constructora, la administración que la contrató y la madre que lo parió. Eso pasa por encarga-í una carretera a quien no sabe ni hacer una caleya. Ye como si a Duke y a mí, que hacemos mal esta columna, el periódicu nos encarga escribir El Quijote, La Eneida o les aventures del Capitán Trueno. Lo mismo.

Resultado: “¿no quiés taza? Pues toma taza y media”. Tuvieron que volar doscientos metros de carretera para que las aguas acumuladas siguieran con su curso hacia el Cantábrico y, como consecuencia de esa voladura, los conductores que van y vienen, para y desde Galicia, tienen que soportar un rodeo de una hora, o ir y venir por Ponferrada, Torrelavega o Pola del Tordillo. Además, como son los listos de “lo que yo te diga” o “¿vas decímelo a mí?”, al realizar esas obras cortaron un cable de fibra óptica y dejaron sin internet y teléfono a media población del occidente asturiano. Pepe Gotera y Otilio no lo hubieran hecho mejor.

Ahora toca acometer las obras de reparación y reposición de la 634, sin olvidarse de las indemnizaciones oportunas a todos los perjudicados. Parece que lo primero llevará varios meses porque, como en este país pasa lo que no pasa en otros, si cuando hicieron la primitiva carretera se quedaron cortos, ahora cuando la reparen se pasarán de la raya, no lo duden, y harán un puente atirantado como el de San Francisco o el del Corredor del Nalón no sea que el Barayo se desmadre otra vez y les joda la cosecha de fabes de la granja. De todas formas lo primero ha de ser indemnizar a esas personas que han perdido todo lo que tenían y se han quedado en la calle y en la ruina. Primero las personas, luego la puta carretera. Sin canutos ni macarrones.

Imágenes obtenidas de Google

No hay comentarios:

Publicar un comentario