La personalidad en un trazo.
La sencillez es la mayor muestra de elegancia en todos los
aspectos, en el maquillaje de ellas, en la ropa y el peinado de ellas y ellos…,
y por supuesto también lo es en la escritura. En este contexto nuestra firma es
un sello que realza o minimiza lo simple o lo ampuloso y complicado de la
personalidad del individuo. Siempre llamaron nuestra atención las firmas de
jueces, notarios, médicos y componentes de otras profesiones que, dado el
volumen de papeles y documentos que tienen que validar con su firma y en aras
de la economía de tiempo, lo hacen con un simple garabato, un trazo firme y
definitorio que denota la procedencia del autor. En cambio también nos picó la
curiosidad el observar firmas barrocas, retorcidas y enmarañadas que denotan
una personalidad misteriosa, barroca e indescifrable. Muchas veces me he parado
a intentar desentrañar alguna de ellas y, en la mayoría, he abandonado la tarea
cuando comprobaba que nadie podía saber por dónde había empezado y en qué lugar había
concluido. No somos grafólogos, pero a la vista de una madeja de esta índole
nos preguntamos en qué noche de terror han ideado sus autores ese nudo
gordiano.
En cierta forma es el caso de la firma de Trump. Claro está
que, a diferencia de otras, se sabe que empieza por la izquierda y termina por
la derecha, como muchos políticos en la actualidad. Pero es demasiado larga,
con muchos trazos similares, con picos altos y bajos continuados que, supongo,
serán contados a la hora de estamparlos. Es una firma grande y gruesa, que mete
miedo como su propietario. Pero con la carrera que lleva con sus decretos y la
que le espera en los próximos años debería de simplificarla y reducir su tamaño
porque llegarán momentos que esté firmando una declaración de guerra (pongamos
por caso) y se le agotará la tinta o se extragará el plumín. Algo que bien
podría haber sucedido cuando decretó su enfrentamiento con la inmigración. La
Corte suprema, que lo suspendió, bien pudo pensar que aquello iba firmado por
el Jocker de Batman.
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