miércoles, 9 de diciembre de 2009

MIS PERSONAJES: ALBINO SUAREZ, la infatigable pluma del Valle del Nalón



Escribe como quien habla. Su prosa y sus poemas son tan consustanciales a él como lo es su propio sombrero. Lo hace desde su juventud de forma autodidacta. Observador de la vida cotidiana y de las circunstancias sociales del momento es autor de más de medio centenar de libros donde predomina el ripio, no desprovisto de sorna y acidez. Es el mejor conocedor de la figura y la obra del poeta gijonés Alfonso Camín. Nacido y residente en Pola de Laviana, a pocos de ustedes les pasará desapercibido este hombre conversador e ingenioso que es Albino Suárez Cortina. Como resulta habitual en estas entrevistas, nos vemos en La Montera donde, antes de sentarnos a lo nuestro, saluda a varios parroquianos de Sama que conocen y valoran al personaje y a su obra.

- Me asalta cierto rubor al iniciar esta entrevista porque, no en vano, eres mucho más veterano en estas lides de la escritura. Podríamos decir en este caso que un alumno entrevista a su maestro para el medio en que ambos colaboran como es CIUDAD LINEAL.
- Soy más veterano que tú pero más malo en valía…
- Que va. Todo lo contrario lo que pasa es que yo abundo en el tema columnas y tú te dedicas más a escrituras serias.
- Yo divago mucho en la literatura que hago, si a eso se le puede llamar literatura. Entremezclo prosa y verso, pero sí. Ya cuando tenía veinte años me empezaron a gustar estas cosas. En aquella época no se podía decir que fuera una edad avanzada para ello.
- Entraste a trabajar en la mina a los dieciséis años…
- Aún no los tenía, tuve que cambiar la fecha de nacimiento para poder entrar. Pero yo llevaba trabajando desde los doce años machacando grava con los pies en la carretera de La Faya los Llobos. No había calzado y se utilizaban trapos y sacos atados a los pies con un alambre.
- Y, entonces, ¿tu formación escolar?
- Nula, cuatro días. Y, parece mentira pero en lugar de la escuela andábamos desfilando por aquellas carreteras cantando Montañas Nevadas. Era lo que en aquella época imperaba. Si lo que quieres saber es dónde están mis estudios pues carezco de ellos.
- Quería llevarte hacia un tema: con aquellas imposiciones, trabajando en la mina y sin escuela de por medio, ¿qué inquietudes tiene un chaval de veinte años para aficionarse a la lectura y, sobre todo, a escribir?
- Estas cosas deben de nacer con uno, seguramente, porque a mí lo que me pudo llegar en aquellos tiempos fueron algunos tebeos. Luego empecé con algo de poesía, posiblemente con Bécquer, poeta que no era pecado citar, luego Espronceda y Campoamor. Más tarde, pasado el tiempo, fui conociendo otros ambientes, hasta que llegué a conocer a Alfonso Camín. Me hice su abanderado en Asturias.
- Te has adelantado a mi pregunta. ¿Por qué Camín?, ¿lo conocías ya o fue a través de su lectura?
- Fue precisamente un contrasentido de un artículo que leí en el periódico “Región”, ya desaparecido, donde el articulista ponía a Camín a parir, al tiempo que le calificaba de “ilustre”, “egregio” y “gran poeta”. Me sorprendí y, más tarde, me presenté a un poeta amigo de él, Emilio Martínez, con el que había estado en Cuba y me preguntó si había leído a AC y ante mi negativa me dijo de forma muy convincente que lo leyese. De manera que unos meses más tarde estoy con otro Emilio, Diaz, que resultó ser ahijado del primero y le pregunté por AC. Con énfasis me respondió, “pero cómo no voy a conocerle”. Yo le dije que había leído aquello de Región y me respondió, ¿pero qué van a decir éstos…? Me dejó unos libros donde encontré algo de Asturias que nunca había visto, una forma de hablar de ella que me dejó pasmáo. Me dio la dirección de AC en Cuba y le escribí.
- ¿Supongo que te respondió?
- Me sorprendió. No había pasado un mes cuando recibí una carta certificada donde me contestaba y me anunciaba la llegada, en correo aparte, de una serie de números de la Revista Norte y algunos libros. Ahí ya noté un rasgo de desprendimiento en este personaje que llegué a descubrir, más tarde, como el poeta más grande de la lengua castellana en el siglo XX. Que digan lo que quieran los que vienen con premios de lo que les de la gana, pero AC está por encima de ellos. Comencé a sentir un gran aprecio por él. Tiene mucho en prosa, libros de historia, entrevistas…, fue un escritor impresionante. El libro más emotivo que hay sobre la Revolución del 34 es “El Valle negro” de AC. Es soberbio. Si Alarcón de Icaza tiene un monumento en Granada sólo por aquellos versos de “dale limosna mujer que no hay en la vida nada como la pena de ser ciego en Granada”, Camín debería de tener uno en cada esquina, en cada plaza de Asturias. Luego le conocí personalmente y tuve una gran relación con él. Lo respeté tanto que fui tan estúpido de no grabar alguna de mis conversaciones con él. Esto es lo que ahora lamento.
- Una cuestión importantísima en tu vida de escritor: Veinticinco años haciendo y editando la revista Alto Nalón, y elaborándola tú solo. ¿Cómo nació esta idea?
- Quizás fuera por una necesidad de escribir. Ahí se hablaba de una serie de temas que posiblemente no pudiera decir de otra forma, aunque fue el 83 cuando la revista vio la luz por primera vez. Se hicieron temas de Asturias que resultaban desconocidos, personajes como Bárgana del que se decía que bajo su paraguas se atechaban muchos, también sucesos… Y lo más interesante que hice, creo yo, fue una serie de monográficos de temas mineros tanto en el aspecto literario como fotográfico. Son fotografías comentadas que tienen toda una historia detrás. Fueron seis o siete números de doscientas y pico páginas cada uno. Al margen hubo números conmemorativos como por ejemplo “Asturias en la voz de los Poetas”, aquellos que cantaron a nuestra tierra, tanto los asturianos como los no asturianos. El último número fue de doscientas cincuenta páginas y a todo color. Fue un trabajo de mil demonios.
- Tanto en libros como en la revista eres tu propio editor.
- Sí. En lugar de irme de vacaciones a Cancún o a Pernambuco, me quedo en Laviana y me gasto el dinero en editarme. Es una satisfacción, aunque ahora voy enfriando. De todas formas este año he publicado este que te he traído (Aires de Laviana) y otro anterior. Nuestra cuenca es adelantada a todas en el tema de la canción minera: “Los mineros del Fondón”, “Cuando la máquina sale”… y muchas otras que son cantadas por intérpretes de otros lugares. Tengo un libro sobre ello que si hubiera sido publicado en otro lugar se hubiera hablado de él. La pena es que cuando se habla del Valle del Nalón la gente cree que se trata solo de Langreo. Y no es así. Ya está bien.
- Hablando de eso. ¿Cómo ves la idea de un único Ayuntamiento en el Valle?
- Honesta y honradamente puedo decirte que nunca he analizado a fondo esta cuestión. Pienso que al aunar los cinco municipios se llegaría a un número de habitantes que beneficiaría a la totalidad de la población. Desde ese punto de vista me parecería bien. Sin embargo, si lo miramos desde el punto de vista de los localismos, que evidentemente existen, se me antoja que cada cual arrimaría el ascua a su sardina. Por ejemplo, ¿dónde estaría ubicada la Casa Consistorial?. Lo lógico sería que fuera en el centro geográfico del territorio, pero seguro que habría tiros para conseguir su sede. Influiría más Langreo por ser el municipio de mayor población, en cambio quizás lo justo fuera que esa capital administrativa estuviera en Sotrondio o Blimea. Es algo similar a lo que ocurre con el Hospital Valle del Nalón que está bastante alejado de la zona central. De todos modos no estaría mal esa unión municipal.
- Hablemos de la honestidad de los políticos, de todos ellos.
- ¿Existe esa honestidad? Yo creo que dejan bastante que desear. Lo que pasa es que los que nos tocan más de cerca en nuestras ideas parece que te duelen menos. Sin embargo esas corruptelas, grandes o pequeñas, que hay existen en todas partes. Dejémoslo así.
- ¿Qué haría Tini Areces si encontrase una barca de somalíes pescando sardinas frente a la playa de San Lorenzo?. Te pregunto por el asunto del Alakrana.
- En este tema me llama mucho la atención el asesoramiento de estos piratas. Parece ser que tienen unos bufetes en Londres que son la de dios. ¿Cómo entonces se va a unir la UE y poner mano dura en esta cuestión? Lo que sí creo es que hay unas reglas que deben de seguirse y, en este sentido, no me parece muy de recibo el que se devuelvan a los piratas detenidos, aunque este haya sido el trato. Por otro lado me parece poco honesto lo que hace la oposición, claro que habría que saber qué hubieran hecho ellos en este caso. Lo que pasa es que yo, que soy socialista, hay veces que estoy con Zapatero que muerdo. Por ejemplo, ¿qué pasa con la separación de Iglesia-Estado, con la aconfesionalidad, cuando les están llenando de dinero? Fíjate que la Iglesia está exigiendo siempre la de dios (nunca mejor dicho). Cuando antes llevaban el 0,3 % ahora llevan el 0,7 que es más del doble. Entonces sale el Martinez Camino, que menudo sáharo es este individuo, y dice que le parece bien, que ve bien el acuerdo. Esto es como cuando el Rodrigo Alvarez de las Asturias donó el Coto de Tiraña y el Coto de Orlé al Convento de San Vicente para que cuando él muriera le hiciesen misas. Digo yo que de esa manera rezo yo por cualquiera.
- El obispo auxiliar Berzosa y su afán porque nos enterremos en lugar de la incineración. ¿Te parece serio?
- Yo estoy maquinando qué voluntad voy a dejar si no tengo a qué recurrir. Me explico. Si yo me quiero enterrar en un cementerio civil, ¿dónde están los cementerios civiles?, porque resulta que hay gente que se enterró por lo civil, prescindiendo de los oficios religiosos, pero están enterrados a parte en cementerios de la Iglesia. Es que nos lo llevan todo. Se llevan hasta los muertos. ¿No me dirás que no especularon con los nichos? Ya ves que soy un gran creyente. Yo quiero que Monseñor Camino me excomulgue, porque estoy de acuerdo con el aborto. Lo que pasa es que no te dejan ni apostatar, apartarte de la Iglesia porque, al final, todo son problemas. Tienen demasiado poder, pero que dependan de sí mismos y que nos dejen en paz a los demás, a los que no creemos como ellos dicen que creen, que yo lo dudo algunas veces. El mundo tiene un montón de millones de años y Jesucristo sólo dos mil. ¿Dónde estaba antes?
- ¿Conviene desenterrar la memoria?
- Sí. No debe de permanecer enterrada e ignorada en tanto que otras memorias están honradas y enterradas. Desenterrar esta memoria es homenajear la vida de nuestros antepasados que fueron, muchas veces, víctimas injustas, sin más delito que tener un sentimiento político. Si unos, habiendo sido vencedores, están identificados y con todos los honores, ¿por qué muchos de los vencidos no gozan de ese derecho?. Ahora hay un disparate tremendo con Lorca. Pero bueno, ¿qué familiares son esos que no permiten su identificación?. Lorca es ya un mito. No es patrimonio de sus familiares sino de la cultura universal que quiere saber si está ahí, o dónde está.
- ¿Cómo titularías la mejor noticia que quisieras escuchar? Algo así como el fin de las guerras o del hambre en el mundo.
- No lo concibo. No la encuentro por una razón, porque no tengo confianza en que el hambre desaparezca, en que la paz sea absoluta. Todo esto yo creo que no va a desaparecer nunca. Está bien que las personas tengan sentimientos, humanismo, pero a la vez veo que, por otro lado, existen los sentimientos y los valores contrarios a estos.
- ¿Te gustaría una noticia que dijera que desaparecen las monarquías?
- Pienso que sí. Una noticia donde se dijera eso, no que hubiera que acabar con ellas, no. Mira: España es una monarquía constitucional y, evidentemente ahora estamos en crisis, cuando hay más de cuatro millones de parados, más de seis de emigrantes ilegales y más de tres de funcionarios que yo no se lo que me pueden producir, esto supone un gasto tremendo para el erario público. ¿Y cuanto nos supone la CasaReal?, y ¿cuánto me supone la Iglesia?. ¿Por qué la Iglesia no vive de sus medios?, que tiene muchos, tantos como el Estado. Y la Casa Real que viva de su corona, ya que son tan intocables. De manera que yo creo que el mundo no iba a ir peor porque desaparecieran las monarquías.
- Con los años que tienes…(me interrumpe y me dice: eso es lo malo), ¿cómo has visto cambiar el Valle del Nalón?
- Hace años no me imaginé verlo como ahora lo estoy viendo. Lo veo pulcro, comunicado… Bueno, evidentemente el desarrollo social de toda índole ha influido mucho. De todas formas veo que está perdiendo población. Carece, por tanto, de puestos de trabajo. No se puede esperar que todo suceda como algunos organismos, no se cuáles, dicen que va a suceder. El turismo puede ser un factor determinante, pero siempre que haya ese turismo, que no haya una crisis como la de ahora. El Valle del Nalón no es una zona turística, al menos no tiene una gran demanda. Yo estoy muy a gusto aquí, pero no le veo un futuro nada claro.
- Al margen de Alfonso Camín, dime un personaje histórico.
- No lo se. Hay muchos personajes que pueden resultar ejemplares. Podría ser Severo Ochoa en lo científico, el Cid en cuanto a su desarrollo guerrero… El personaje no está en el hecho de haber sido histórico, sino en el hecho de haber significado algo para alguien. Así de sencillo.
- ¿En qué cambiarías la Constitución?
- En principio me pregunto ¿cuántos españoles conocemos la Constitución?. Yo reconozco que la leí en su día y que ahora no me acuerdo lo que dice este artículo, ni el otro. Pero eso sí, creo que esta Constitución está incompleta. Desde el momento que no es capaz de aceptar la posibilidad de un estado republicano, ya no está como debería de estar. Habría que mejorarla.
- ¿Y los sindicatos que ahora tenemos?
- No son reivindicativos. Ahora no viven de sus afiliados, esto está claro. Por tanto de algo tienen que vivir y tienen que seguir caminando. Creo que están acomodados, uniendo parte empresarial con parte trabajadora. Creo que no son los sindicatos que en otros tiempos defendían al trabajador a capa y espada.
- ¿Qué te parece la proliferación de Expedientes de Regulación de Empleo?
- Ahí le duele. Resulta que muchas empresas reciben ayudas millonarias para instalarse y después, de la noche a la mañana, cuando les apetece, cuando por cualquier circunstancia juzgan que es la hora, montan estos ERES y se largan. A mi me parece que se les están otorgando un montón de beneficios y de ayudas que no deberían de ser así. Cuanto menos tendrían que sujetarles de alguna forma. Tanto los sindicatos como estas empresas quieren depender del gobierno y el dinero que se les da se va con ellos.
- ¿Qué piensas de eso del bable y de la Academia de la Llingua, que llaman?
- Decir algo de esto conlleva posibles enemistades o, al menos, que te miren mal. Porque nosotros, en las Cuencas, que hablamos medio bable y medio castellano hablamos de forma asimilable y yo tengo algunos libros escritos de esta forma. Lo que pasa es que eso que se hace ahora extraído, según dicen, de la Academia, no hay dios quien lo entienda. Lo siento por ellos, que digan lo que quieran, pero cuando estos tíos subvencionados por el estado o el gobierno asturiano se dedican a inventar un idioma es para echar a correr. Es espantoso. Si el bable se sostuvo siempre en la aldea y ahora quieren metérnoslo a calzador desde la capital. - ¿En qué aspecto de tu vida te sientes más realizado?
- Realizado me siento con todo lo que hago. Es mi mundo que, por otra parte, no es nada extraño ni fuera de lo común. Me siento realizado en lo que hago. Dejar algo escrito es una gran satisfacción.
- ¿Cómo te gustaría ser recordado?
- Siendo pragmático debería de decirte que, después de muerto, qué más da. ¿Tú crees que habrá alguien que me recuerde?. Hombre, tengo algunos libros curiosos, pero bueno, por lo menos que no me maldigan.

No lo harán. Quisiera terminar esta entrañable charla con una reseña de su último libro “Aires de Laviana”. “Y como el ayer pasó/y el ahora pasa, siento/que lo que ardía…quemó/y que alguno como yo/ya lo está llevando el viento. /Pero no importa, la fe/de la juventud primera/sigue y late y lo que fue/yo no se de qué manera/pero se conserva en pie…”.

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