EN EL OLVIDO

Tribunales Populares.  Langreo

Nos parece de interés extractar nuestra intervención ante los Tribunales Populares de Langreo que declararon al Valle del Nalón históricamente olvidado. 

 “Señoras y señores miembros del jurado de este Tribunal Popular: Esta acusación que les habla les trae a que enjuicien el tema que acaban de escuchar de labios de Su Señoría: Si a lo largo de los tiempos, de estos últimos cincuenta o sesenta años, nuestro Valle del Nalón ha sido olvidado, y aún lo es. Posiblemente cada vez más. Quien más, quien menos de los aquí presentes esta tarde conoce nuestra historia, nuestra dura historia. Sabe que desde estas Cuencas se ha dado a la Región y al País una enorme y productiva actividad industrial y minera, a través de la fabricación del mejor acero que se exportó, a través de la extracción del carbón de nuestras numerosas minas, a través de nuestra riqueza acuífera –no olvidemos que el agua de nuestros dos embalses del alto Nalón suministra y cubre las necesidades del centro de la Región, que no las nuestras- y, quizás sobre todo, a través del elemento humano, de los hombres y mujeres del Valle del Nalón. De tantos que dejaron sus vidas y su salud en el fondo de la tierra. Los de aquí y los foráneos, los nalonianos y tantas gentes que vinieron desde otros lugares de la geografía patria a instalarse entre nosotros y construir un futuro. Emigrantes que fundaron aquí sus familias y se integraron con la población autóctona que los recibió con los brazos abiertos. 

 Carbón, Acero, Agua, Personas. Eso es lo que hemos dado a España y Asturias. Todo lo mejor que tiene esta tierra. Y lo que hoy nos preguntamos aquí y ahora es: ¿Qué nos han devuelto a cambio de todo ello? ¿Hemos sido compensados o mantienen una deuda con este Valle? Cierto es que hemos mejorado, sin duda. Se han construido carreteras, polígonos industriales… Nuestras ciudades más importantes presentan una fisonomía bien distinta que la que tenían hace cincuenta años. Pero si esto es cierto y patente, no es menos cierto que esas carreteras y autopistas, hoy día, sirven más bien para salir del Valle, no para entrar en él. Esas ciudades mejoradas en sus edificios, en sus viales, en sus parques y jardines, acogen cada vez a menos población. Efectivamente, si hace medio siglo teníamos una población que superaba los cien mil habitantes, hoy día no alcanza los setenta mil. ¿Por qué? Al margen de el envejecimiento de nuestra población y del bajo índice de natalidad, hemos perdido habitantes porque se nos han ido, y se nos marcharon porque aquí no vislumbraban un futuro cierto y halagüeño. La incertidumbre se ha instalado entre nosotros hace muchos años, entre nuestra juventud sobre todo. Y da toda la sensación que, al igual que en los buenos tiempos fuimos solidarios con el resto de Asturias y de España (Andalucía, Extremadura, Galicia…), fuimos sus hermanos, en los tiempos que corren hemos tornado a ser nada más que sus primos. ¿Dónde estaban los gallegos por entonces y dónde están ahora? Los duros y aguerridos hombres del Valle del Nalón convertidos en los Primos de España. 

Las grandes empresas se van muriendo poco a poco, caso de HUNOSA que tuvo más de veinte mil trabajadores y hoy apenas supera los dos mil. Otras no se mueren pero se están yendo poco a poco, caso de Duro Felguera. Se morirán hasta nuestros partidos judiciales, el de Langreo y el de Laviana. Eso sí, nos quedan los Museos, el MUMI, el MUSI, EL DE LA MADREÑA…, y la madre que los parió. Y ante esta sangría laboral ¿qué han hecho los poderes públicos?... ¿Han reindustrializado, han reconvertido?... A través de los, ya extintos Fondos Mineros, han dado dinero que en algunos casos ha servido para crear empleo, pero que sin embargo en la mayoría solo se han utilizado para crear empresas fantasma con un ejército de operarios dedicados en muchos casos a afilar el lápiz y mirar al cielo, empresas que ya se han ido con la música a otra parte y que todos ustedes tienen en sus mentes. Y esos fondos han ido también para infraestructuras, carreteras para salir del Valle como decíamos antes y también, presuntamente, para dejarnos enormes socavones ú obras sin concluir. 

 Señoría, Miembros del jurado, la acusación no desea enjuiciar en este acto a ningún partido político que haya detentado el poder a lo largo de la historia de nuestra joven democracia. Nada más lejos de nuestra intención. No buscamos culpables –quizás todos lo seamos en alguna medida-, sino concienciarnos de lo que se ha hecho mal para no volver a incurrir en el error, si no quisieron o no pudieron hacerlo mejor, aunque pueda resultar ya un poco tarde. Vuelvo a repetir: queremos saber si somos acreedores de algo mejor que lo que hemos tenido y ahora tenemos. Si se nos debe algo, si lo que ha tenido que venir para aquí se ha ido a otros lugares o alguien se lo ha llevado. Demostraremos que desde los poderes públicos se ha hecho muy poco por compensar a esta Cuenca de toda la riqueza aportada al país y de todos los esfuerzos y sufrimientos de sus gentes, y les pediremos un veredicto de culpabilidad. El Valle del Nalón sí ha sido olvidado a lo largo de la historia. Nos lo deben.”

Fotos tomadas de la Sesión del Tribunal el 4 de Mayo de 2012