viernes, 28 de enero de 2011

DOLOR EXTREMO


Nadie debería de sobrevivir a sus hijos. Esta es la ley de la naturaleza. Pero desgraciadamente, todos los días tenemos noticias de personas jóvenes que infringen esa norma natural y, sin una enfermedad previa y declarada, se van de nuestro lado dejándonos atribulados y repletos de interrogantes. ¿Por qué él o ella?, ¿hay algo que hubiéramos podido hacer?, ¿por qué no aprovechamos más su compañía?, y tantas otras preguntas que nadie puede respondernos, que a muchos les hace refugiarse en la fe y a otros renegar de ella. Es el dolor extremo, ninguno lo supera. Muchos de ustedes son conocedores de que, quien esto escribe, ha perdido a un hermano en estas circunstancias. También a nuestro amigo Piris, a quien recordamos aquí en cada aniversario. Por tanto hemos pasado por ello y fuimos testigos de lo acaecido en los entornos familiares. Hablamos con conocimiento de causa y, aunque no es nuestra costumbre ponernos trascendentes y, además, siempre hemos evitado eso de alabar las virtudes y minimizar los defectos de aquellos que se marcharon sin avisar, no hablaremos de ello sino de quienes se quedan encogidos y golpeados por el destino. De la familia más próxima, de su compañera y sus hijos, de los hermanos y los padres.

La semana pasada falleció en Langreo un hombre como una viga, alto, fuerte, joven, lleno de vida. En su velatorio tuve la ocasión -triste ocasión- de hablar con su padre y, como todos los padres que han pasado por esto, estaba en una nube, sin creérselo aún, hundido y machacado por un millón de mazas. Ayer, seis días después de aquello, me lo encontré paseando y estaba exactamente igual. Sin saber en qué refugiarse, sin entender lo ocurrido, preguntándose mil cuestiones y confiando en que el transcurso del tiempo vaya restañando la inmensa herida abierta en su corazón. Me dice que ahora el tiempo no pasa, los días se convierten en interminables, las noches en un calvario. Cuando antes no veía pasar ese tiempo. Era un suspiro. Y yo, que he sufrido lo mismo, no se qué decirle. Tampoco encuentro explicaciones. Pero le he dicho que creo que no hay que buscarlas porque así es nuestra conformación biológica, al menos eso pensaba en aquel momento. Pero, ¿de qué le sirve mi observación? Seré bocazas. Me confiesa que tenía previsto un viaje con su esposa para dentro de unos meses y que no sabe qué hacer…

Los hechos luctuosos, sobre todo los inesperados, siempre interfieren en los proyectos. Un hijo se va y deja una familia rota de un dolor que no cesa por lejos que uno esté. Sin embargo, dada la recurrencia de las personas y los lugares, el alejarse de ellos favorece la distracción, el quitarse por unos momentos del alma el insoportable sufrimiento. No debéis sentiros culpables por marcharos unos días. Si ello supone un bálsamo, una ayuda para comenzar a superar vuestra desgracia debéis de hacerlo sin recelo a lo que podamos decir los demás. Nosotros estamos para acompañaros y, en la medida de nuestras posibilidades, serviros de pañuelo para cuando nos necesitéis. ¿Qué más podemos hacer? Solo daros un abrazo fraternal.

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jueves, 27 de enero de 2011

CONTAMÍNAME



Muchas veces sentimos la tentación de hablar de fútbol o de toros, o de lo que pinte, pero los acontecimientos cotidianos nos llevan siempre a lo mismo. A la asquerosa política. Y no somos entendidos en ella, dios nos libre entender de eso. Al menos no lo somos más que usted, que usted y usted, los ciudadanos de a pie. Lo que aquí hacemos no es más que dar nuestra profana y humilde opinión sobre la actualidad y convertirnos, de esta forma y sin pretenderlo, en portavoces del sentir de algunos. Evidentemente no de todos. Pues bien, se preguntarán ustedes el por qué de este preámbulo y Duke les dirá que cuando uno piensa que lo sucio de esa política, a la que hemos llamado asquerosa, está solamente fuera de nuestras fronteras, allende Pajares, vienen tres altos cargos del Principado y lo joden.

Cándidamente, algunos creían que la corrupción era solo patrimonio de personajes como Roldán, Vera, Rubio y otros que en aquella época, hace casi dos décadas, metieron la mano en la saca y, aunque muchos terminaron en prisión, no habiendo devuelto nada ahora gozan de una jubilación de lujo merced al saqueo de las arcas públicas. Pero quienes eso creían se han ido dando cuenta que ese afán de rapiña ha llegado a todos los rincones de las administraciones de todos los puntos de la geografía nacional, de manera que, hoy día, la política es una profesión bajo sospecha. Un amigo funcionario me decía que si cerramos los ojos y al azar apuntamos con el dedo en el mapa daremos, con seguridad, con un lugar donde existe corrupción. Pero la cuestión no solo afecta a los altos cargos políticos, sino que se ha trasmitido también a muchos funcionarios que, viendo el panorama y la impunidad con la que otros actúan, piensan que ellos no van a ser los tontos y se suman al carro del saqueo, de las comisiones ilícitas, de las licencias interesadas, de la sociedades interpuestas y, en definitiva, del latrocinio más descarado. Ahí tenemos el ejemplo, en dos funcionarias de la administración del Principado.

Al margen de la propia, de la responsabilidad penal y civil que en su momento sentencie el juez, existen culpas y responsabilidades de aquellos que los han puesto ahí. La culpa “in eligendo” y la culpa “in vigilando” se utilizan en el ámbito del Derecho para describir la responsabilidad civil de los patrones con respecto al comportamiento culpable o negligente de sus empleados cuando estos causan daños a terceras personas. Y este es el caso. No basta con afirmar, como lo ha hecho la consejera de Presidencia, que fue ella quien puso el asunto en conocimiento de la Fiscalía. Se requiere también un signo de voluntad. La dimisión o el cese. Lo mismo que para quien colocó ahí a su amigo en el cargo más visible y lo mantuvo en él durante tres mandatos. El Presidente y la Consejera deberían de dimitir inmediatamente. Sería la única forma de devolver la confianza a los ciudadanos, empezar a hacer limpieza e impedir que sigamos mezclando a los malos con los buenos. Con los que no han querido contaminarse.

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martes, 25 de enero de 2011

CAPÍTULO VIII: ¿QUIÉN VA EN LAS LISTAS?


No es mera coincidencia el hecho de que ahora mismo todos los que escribimos aquí estemos pensado en lo mismo. Ni por asomo se le ocurriría a Duke proponerme una columna acerca de lo bien que lo están haciendo en el gobierno y, desde luego, lo mejor que lo están haciendo desde la oposición. Si es que tenemos gobierno y oposición. Parece como si unos y otros estuvieran más pendientes de lo que hace el contrario que de gestionar los asuntos propios. Y es algo que sucede siempre que en el horizonte más cercano se vislumbran unas elecciones, en este caso locales y regionales, cuyos resultados serán, sin duda, el patrón para medir la actuación de las siguientes generales para después de un año. Es decir, tanto a nivel nacional como regional y local, todos actúan en clave electoral. Pero mientras esto ocurre nadie muestra sus cartas, esperando a ver las del rival. Y en tanto que unos van y otros vienen, se tantean, se insultan y se crispan, llega el enemigo y los mata a todos con tirachinas.

En nuestra región la irrupción de un nuevo partido en el panorama político le da un aderezo especial a la cuestión de forma que, cuando aún se desconoce lo más mínimo acerca de personas y programa electoral de Foro Asturias, todos esperan a saber quién acompañará a Cascos en la aventura. Así que algunos ya se han descolgado y otros aguardan a saber si fulanito entra o sale, si tendrá puesto en una u otra lista para, en su caso, intentar colocarse en la contraria, o esperar a que una de ellas tenga un vacío para rellenarlo. Algo que presumiblemente ocurrirá en Llanes, cuya Junta Local se ha sumado al bando disidente. Es lo que pasa cuando entras en un bar y esperas impaciente a que se levanten de una mesa para poder ocuparla. Es el juego de la política, el quítate tú para ponerme yo. De la política sin criterio, de la aprovechada. De la trepa.

A lo largo de estas últimas semanas hemos visto las distintas visitas -dos o tres por semana- que Francisco Álvarez Cascos ha girado a varias localidades de la geografía asturiana captando adeptos para la causa y repartiendo consignas. La última de ellas el pasado sábado en Mieres y, seguro que muy pronto, en Langreo. Y cuando en los informativos hemos visto concejales populares de ambos municipios en algunos de estos actos nos preguntamos, no sin motivo, qué es lo que harán los grupos políticos de estos ayuntamientos en los próximos días, porque ni en uno ni en otro concejo se conoce aún quiénes conformarán las listas populares. ¿Será leal a su apellido D. Pedro?, ¿lo serán sus compañeros del grupo?, ¿y la Junta Local? Mucho nos tememos que algunos, o todos, querrán enfundarse la nueva chaqueta y devolver la usada al fabricante cuando lleva usándola mucho tiempo, ha cogido la forma de su inquilino, sus olores y sus vicios. Partidos políticos de usar y tirar, como primero lo han hecho los instigadores del Foro. ¿Confiarán los ciudadanos indecisos o sin color político en aquellos que habiendo vivido como dios a la sombra de un árbol pasan ahora a cobijarse bajo la de otro? No tardaremos en salir de dudas.

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domingo, 23 de enero de 2011

ESTOS SOBRAOS DEL SENADO



A la voz de “pueden sus señorías colocarse el pinganillo” pronunciada por Javier Rojo, Presidente del Senado, comenzó el pasado martes un episodio más del esperpento nacional. Fue el catalán Ramón Aleu el primero en utilizar una lengua cooficial para defender una moción en la cámara alta desde que en el pasado abril se aprobase la reforma del Reglamento Cameral conforme a la que, en adelante, se podrá hablar en el Senado en cualquiera de las lenguas patrias que pasan de ser oficiales a nivel regional para serlo también al nacional. Una muestra más del mareo de la perdíz y de las maniobras de distracción a que nos tienen acostumbrados nuestros políticos en tiempos de vacas flacas. Seguimos sin entender cómo es posible que en un país con una lengua común, la segunda más utilizada en el mundo, para entenderse en el parlamento se tengan que utilizar otras por muy oficiales que sean en sus respectivas comunidades autónomas. No nos entra, oigan. Nos parece muy bien que en España existan otras lenguas y que se hablen, pero creemos que deben de utilizarse en sus regiones y parlamentos respectivos no en la sede de la soberanía de la nación, cuya lengua es el español. Y eso no lo dice Duke, lo dice la Carta Magna. ¿Que es una forma de reafirmar el ámbito de territorialidad de la cámara?, vale. ¿Que ello denota el plurilinguismo y la riqueza cultural de nuestro país?, vale. Lo que no nos vale es que un asturiano, un andaluz, un extremeño o un madrileño en Madrid, para entender lo que dice un catalán, un gallego o un vasco tengan que ponerse unos cascos en la quijotera como si estuvieran en la ONU o en el parlamento europeo. Por ahí no entramos.

Y lo que menos nos gusta de este vodevil es que, para llevar a cabo esta reforma, se tenga que contar con la presencia de siete traductores y se gasten dos millones de las antiguas pesetas por sesión en este paripé. Doce mil euros, que dicho sea de paso, para estos sobraos son el chocolate del loro, que supondrían el sueldo anual de un mileurista, la solución económica de muchos pequeños municipios -ahí está la verdadera cooperación territorial-, o muchos platos de comida para aplacar el hambre que tantos y tantos españoles tienen que estar pasando en la actualidad merced a la brillante gestión económica de sus representantes. Senadores que no van allí a representarles ni a solucionar sus problemas sino a hacer el pijo. A jugar a políticos y políticas, a cobrar y a figurar.

Si ya se entienden mal en condiciones normales, esto es hablando español, -por no decir que no se entienden-, difícilmente lo van a conseguir hablando en otras lenguas. Y en los tiempos en que vivimos lo más importante es que los políticos se entiendan para sacarnos de esta crispación, de esta crisis económica y de valores y, en definitiva, para que se huya de la artificiosidad y todo vuelva a la lógica de lo normal. Así empezaron en Babel y, aún sin pinganillo, así les fue.

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sábado, 22 de enero de 2011

FUMAR, LIGAR Y ESCAPAR


Todo se pega menos lo guapo. Ese es el refrán. Y claro, esos que fumáis, y para hacerlo tenéis que salir a la calle en mangas de camisa, termináis por coger unos constipados del copón que acaban por contagiar a los que fuman y a los que no. Mira chaval, si estás aquí calentín, tomando un vino, ¿pa que quiés salir ahí fuera a coger la muerte? Deja el pitu hombre, gáneslo en salud. Mira que-i lo dije, pues al día siguiente llega con una gripe de la virgen, ponse al mi lao y empieza a estornudar como un descosíu. Ves, animal, ahora vas pegámelo a mí. Eso pásate por ser fumador activu y callejeru. No, eso pásame por respetar les putes normes, achusss…, me contesta. Sale a echar otru pitu y déjame allí pensando si no tendrá razón. El benditu.

Más tarde entro en el super a por unos recaos y encuéntrome con Fer, la mi amiga. Como siempre que la veo, me dirijo a ella con el “sano” propósito de saludarla con el habitual beso -muac, muac- que nos damos de la forma más casta y cariñosa. Cuando estoy a punto del ósculo, pone la mano delante de su boca, se aparta y me dice que tiene gripe. Otra que tal baila. Tengo que decir que Fer es fumadora, aunque ya lo habrán adivinado. Pero ella no sale a echar el pitu fuera del bar, sino que directamente no entra. Quédase fuera, en la terraza. Y allí, toma café, lee el periódicu y fuma los trujas esos que lía previamente, o que-i lía el so hombre. El mi amigu Tista que, dicho sea de pasu, también fuma, pero esti ye de los que sale. Volviendo al super, como les buenes costumbres no se puén perder por mucho que se empeñe la Pajín, le doy a mi amiga el beso de rigor y después de una breve charla vamos a comprar, cada uno por su lado. Y resulta que hoy me levanté con un dolor de cabeza insoportable, tosiendo y con más mocos que los bajos de un banco del parque. Ya está, el putu tabaco. El de los demás, claro. Son las ocho de la mañana y voy a por el pan y el periódico. De camino me encuentro con dos terrazas con gente encogida que charla y fuma. Masocas, pienso para mis mismos adentros. Estos mañana están como Fer y yo. Tien cojones la cosa.

De vuelta en casa abro La Nueva España y leo el siguiente titular: “La ley antitabaco facilita el contacto entre las personas”. En resumen, la noticia venía a decir que el fumar fuera de los establecimientos hosteleros daba lugar a más ligues ocasionales dado que los que lo hacen encuentran la recurrencia en el tabaco para acercarse, conversar y si se tercia… Pues eso, que los que no fuman no tienen la oportunidad del acercamiento amoroso y, por otra parte, son los que tienen que pagar las consumiciones por aquello de que la ley también favorece el “simpa”. Esto es irse sin pagar con la excusa de haber salido a fumar. Así que los hosteleros están que montan en globo por la crisis, la ley Pajín, los fumadores activos, los pasivos, los ligones y los caraduras. Los que fuman, en cambio, han descubierto nuevas formas de relación y de ahorro, de manera que hasta se lo van a agradecer a la ministra. Pa lo que nos queda…

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martes, 18 de enero de 2011

HUMANOS Y HUMANAS


Hoy mismo estuve repasando algunas de mis columnas publicadas aquí, en La Nueva España. Muchas de ellas me sorprendieron hasta el punto de preguntarme si es posible que yo haya escrito esto y qué es lo que habrá pasado por la cabeza de Duke en el momento de hacerlo. Pero sobre todo me he dado cuenta que ustedes, quienes me leen, tienen toda la razón del mundo. Como siempre. Cuando nos paran por la calle es habitual que nos digan eso de “dales caña” o aquello otro de “estás metiéndote mucho con ellos”. Y lo cierto es que de vez en cuando les criticamos. Eso sí, con cordialidad y ánimo constructivo, asumiendo que son humanos y humanas y, como tales, se equivocan, pero nunca a propósito. Sin embargo cuando se trata de figurar y de cobrar no suelen equivocarse. En esas ocasiones siempre aciertan y no se les escapa ni una.

Lo que más nos sorprendió siempre de ellos son sus manifestaciones públicas. Nos referimos a las verbales, claro está. Verbigracia: con respecto al conflicto de Felguera Construcciones Mecánicas quizás les suene la siguiente: “Los trabajadores ya se lo veían venir. Según vienen denunciando desde hace tiempo, la empresa no contrata gente de la zona, no destina carga de trabajo al taller y no realiza inversiones. Creo que Duro debería tener un compromiso mayor con sus orígenes” (LNE 13/12/10); o quizás recuerden la moción aprobada por unanimidad del Pleno municipal el pasado 22 de diciembre en la que el Ayuntamiento exige a la empresa que no siga adelante con el ajuste de empleo en el Tallerón de Barros y donde se reclama a la compañía que, como mínimo, mantenga en Langreo el nivel de puestos de trabajo que tiene en la actualidad. Además, la alcaldesa pidió a la empresa que dialogue con el Ayuntamiento de Langreo para conocer cuáles son los planes de futuro de la compañía. Entre otras, estas son las manifestaciones verbales a las que nos referíamos. En cambio las otras manifestaciones públicas brillan por su ausencia. Así, el pasado sábado una de ellas formada por más de tres mil manifestantes -diez arriba o abajo- recorrió el centro de Langreo hasta la plaza consistorial. Salvo dos o tres concejales del grupo minoritario no se vieron más políticos locales. Nos habría satisfecho ver allí a la regidora langreana acompañada de sus concejales y de todos los de la oposición. Encabezando o cerrando la manifestación, da igual. Pero no, ellos y ellas consideran que con la moción aprobada ya lo han hecho todo. También nos hubiera gustado ver el edificio municipal abierto y que se hubiera ofrecido a los convocantes su balcón para que, desde allí, se diera lectura a los mensajes oportunos. Pero tampoco, el Ayuntamiento estuvo cerrado a cal y canto. Creemos que se han equivocado porque esos dos aspectos que echamos de menos el pasado sábado hubieran sido muy importantes y habrían confirmado la disposición de nuestros políticos a apoyar las legítimas reivindicaciones de los trabajadores de Duro Felguera, pero, como en tantas ocasiones, las palabras se las lleva el viento y las mociones quedan en papel mojado. Por eso nos metemos con los políticos. Por eso los criticamos.

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sábado, 15 de enero de 2011

SANGRE SOLIDARIA


Un niño de diez años con leucemia ingresado en un hospital valenciano. Necesita urgentemente doce donantes de sangre del grupo AB. Según los médicos que lo atienden sería posible salvar su vida si se encuentra la sangre necesaria. Hasta aquí el mensaje que a través de e-mail nos llegó hace unos días. En él se indica el nombre de la madre y un número de teléfono en el que contactar con la familia, con el ruego de que el correo se reenvíe a nuestros contactos. Es cierto que no suelo hacer ningún caso de estos emilios que buscan un desarrollo piramidal en la red, porque suelen tratarse de pamemas, trampas para obtener direcciones electrónicas con fines inconfesables y tonterías propias de gente ociosa o desocupada, que para el caso es lo mismo. Pero en esta ocasión, teniendo en cuenta la procedencia de la noticia -un empresario afincado en Gijón que no acostumbra a idioteces cibernéticas- y también la llamada de socorro del mensaje decidí rebotarlo, como vulgarmente se dice. No me costó más de un minuto. En un solo correo lo envié a dos colectivos y en lo que dura un suspiro la solicitud estaba en posesión de más de seiscientas personas repartidas por toda la geografía nacional e internacional. Y no tengo por qué ocultar los destinatarios. Fueron el grupo de mis amigos de siempre y la asociación de Langreanos en el Mundo, de la que tengo el orgullo de formar parte, máxime viendo los resultados de esta aventura. A través de su presidente, que manejó la situación y me mantuvo informado, no se tardó en tener respuesta al S.O.S. Menos de un quince por ciento de la población tiene este grupo sanguíneo y, efectivamente, un miembro de la asociación residente en Langreo se ofreció de forma inmediata para donar su sangre altruistamente y contribuir a la recuperación del menor. Fin de la historia.

Cuando todo el mundo mira por sus propios intereses, cuando en los tiempos que vivimos la sociedad se ha convertido al egoísmo más puro y duro, cuando se nos ha endurecido el corazón y miramos hacia otro lado para no ver la miseria y los padecimientos de nuestros semejantes y cuando lo que ocurra a los demás no nos afecta en lo más mínimo, cuando ocurre eso y mucho más, aún queda un reducto de personas generosas y desprendidas que para nada participan del sentir individualista de la tropa, que sienten en propia piel las desgracias ajenas, las calamidades y las enfermedades mundanas. Y tratándose de alguien de Langreo, vecino y compadre nuestro, es digna de destacar su disposición a ayudar en la medida de sus posibilidades a quien lo necesita. De esta forma se ha logrado sangre langreana para Valencia, sangre buena y purificadora, sangre solidaria y curativa. Y de esta forma, tan humana y tan sencilla, se ha escrito la historia de un niño anónimo y de un adulto, también anónimo, con sentimientos que transcienden su geografía doméstica. La asociación que ha logrado armonizar la necesidad con el desprendimiento generoso está también para eso, entre otras cosas. Desde esta página queremos felicitarlos y desear a ese niño y a su familia toda la suerte y toda la salud.

viernes, 14 de enero de 2011

LOS LUSOS Y LOS ILUSOS


Las situaciones de Portugal y España son particularmente complicadas a raíz de sus altos déficits y sus débiles perspectivas de crecimiento. Según el semanario alemán Der Spiegel, los gobiernos de Alemania y Francia quieren obligar a Portugal a pedir una ayuda financiera para evitar un contagio a otros Estados muy presionados por los mercados, especialmente, España y Bélgica. Cuando todas las miradas apuntan al país vecino, como primero apuntaron hacia Grecia y luego hacia Irlanda, llega el Presidente de esto y dice que España está ayudando a estos dos países, que ya pidieron apoyo financiero a la UE, y que Portugal "aguantará" porque "tiene fortaleza" y está haciendo las reformas necesarias, corrigiendo su déficit y cumpliendo los objetivos que se ha marcado. Y es que nuestro mandamás lo tiene demostrado. Sabe de esto de la macroeconomía más que nadie y, por si fuera poco, como adivino no tiene precio. También lo ha demostrado en innumerables ocasiones. Así es que con esos antecedentes y el susto que tenemos en el cuerpo desde hace un tiempo, con esto del muy posible rescate a Lusitania nos está entrando un acojone que se caga la perra, con perdón. Y los belgas estarán en idéntica situación.

Esto de la crisis y sus consecuencias solo es cuestión de tiempo. Cae la primera ficha de dominó y detrás de ella empezarán a caer las siguientes, salvándose solo del desmoronamiento aquellas que han sabido guardar la oportuna distancia porque lo han previsto, han repartido el juego y han salido con el seis doble. Casos de Francia y Alemania, que son los amos de la mesa. Y aquí no nos enteramos de nada. Como siempre basta con decir que no pasa nada, que nuestra economía es fuerte, nuestro sistema financiero solvente y que estamos haciendo los deberes, cumpliendo con las perspectivas de reducción del déficit público y bla, bla, bla… Y bla. Parece que aún no nos hemos enterado de aquello de la Ley de Murphy de que nada está tan mal que no sea susceptible de empeorar.

Por lo pronto ya nos han quitado el balón de oro cuando dábamos por hecho que sería para uno de nuestros jugadores. ¿Han visto la cara que le quedó a Guardiola? La misma que pondrán Zapatero y su ministra Salgado cuando desde Bruselas les digan que ha llegado nuestro turno. Pero como estos lo solucionan todo con talante y voluntarismo terminarán por justificarse alegando algo así como que el rescate que eventualmente vamos a necesitar será pequeño o que no se necesitarán más medidas de corrección fuera de las ya adoptadas y, en todo caso, que la culpa de todo ello la tienen los anteriores gobiernos del Pepé. Después nos tocará apretarnos más el cinturón, si aún cabe, hasta estrangularnos e irnos por la pata abajo y en el interín nadie dimitirá, nadie censurará y todo seguirá como hasta ahora. Ilusos que somos. Pero no nos hagan mucho caso, Duke ha tenido un mal sueño y hoy se ha levantado pesimista.

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miércoles, 12 de enero de 2011

¿QUIÉN LLAMA A SU MAJESTAD?


Si es que este monarca nuestro es un fenómeno, ¿alguien lo dudaba? No se si lo han visto. Uniforme de gala. Recepción por todo lo alto para la presentación de credenciales de nuevos embajadores. Un fulano vestido de Mustafá y otro con atuendo occidental, como procede -vamos digo yo-. Y en esto suena el móvil real olvidado encima del taquillón, momento egregio en que pudimos comprobar que la realeza, al menos la nuestra, se suma a eso de los politonos y multitonos, cuando estábamos convencidos de que solo frecuentaban aquello de los barítonos. Pero nuestro Rey es de otra pasta. Le va la marcha. Sobre todo si se trata de sus nietos o, especialmente, de ese que tiene cara de cachondo. Froilán, el primer vástago de la primera Infanta. El tono de llamada es la risa de un bebé. Y Sumajes, sonriendo se dirige hacia el taquillón, coge el móvil y cuelga. ¡Joder, qué marrón! Ye el mi nietu mayor, debió de decir a los presentes. No se cómo estaba el móvil ahí puestu. Debió de dejálu Sofía.

Y es que la Reina y Él para esto de los nietos son de lo más tradicional y han acordado que si llama cualquiera de ellos suene el tono del bebé. Al igual que si llama Rajoy se oiga la sintonía de Pepé, si lo hace Más -como simuladamente ocurrió hace unos días- sea “Els Segadors”, o si lo hace Zapatero todos los que puedan escuchar se den cuenta de que “Susanita tiene un ratón chiquitín”. Están estudiando qué politono ponerse en el Satsung para cuando llame Cascos. Dudan entre el Tanhauser de Wagner y la B.S.O. de Apocalipsis Now de Los Doors, porque es que el “Asturias patria querida” se lo tienen adjudicado a Graciano, por aquello de la antigüedad.

O es que pensaban ustedes que el Rey no tenía móvil, o que nadie lo llamaba. Pues claro que lo tiene, aunque no lo entiende muy bien y solo lo utiliza para recibir llamadas. Como todos los abuelos. Y le llaman, aprovechando que lo tiene, todos los que tienen su número, que suponemos será el 600 00 00 01 de Moviestar, como el carné. Prueben y podrán comprobar cómo no descuelga. Y no lo hace porque no va a coger el teléfono al primero que llame. Eso sí, a Froilán se lo coge aunque esté en firmes, saludando a la bandera en el día de las Fuerzas Armadas, de la Constitución o de la lotería del Niño. Faltaría más. “Yayo, si tienes la moto preparada, cuando termines con el coñazo ese a ver si me llevas a lo del “Biberón”, que está muy güay”.

Y, como harían todos los abuelos, Su Majestad se quitará el uniforme de gala, se pondrá unos vaqueros y una cazadora, y junto a su nieto se irá a disfrutar de lo mejor que tiene la vida. De paso también le irá enseñando las otras cosas, y cuando las haya aprendido le cambiará el tono de llamada por algo así como aquello de Sabina de “Y nos dieron las diez, y las once. Las doce y la una, y las dos y las tres…”. Para entonces mejor que no se deje el móvil olvidado encima de cualquier mueble. Aunque sea de épocas pretéritas.

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domingo, 9 de enero de 2011

CAPÍTULO VII: HOSTILIDADES


Muchas veces nos resistimos a tocar ciertos temas por temor a herir sensibilidades y otras, qué diablos, pensamos que los lectores ya están curados de espantos y nos metemos de lleno porque, cada vez más, estamos convencidos de que la sensibilidad de los poderosos es más bien poco sensible. Estos ni sufren ni padecen. Tienen la sangre de horchata, como diría Miguel Gila. Van a lo de ellos, a coger cacho, y luego el que venga detrás que arrée. Sin embargo en esta ocasión, cuando muchos esperan para conocer qué es lo que piensa Duke al respecto, preferimos permanecer al margen no vaya a ser que luego nos arrepintamos de lo dicho y sea nuestra propia sensibilidad la afectada. Nos referimos al acierto que hayan podido tener los que mandan en Génova en la elección de IPE para encabezar la lista conservadora en las próximas elecciones autonómicas al parlamento asturiano. No obstante, en esta locura en que se ha convertido el culebrón de los populares en Asturias, para nosotros hay un par de aspectos que son incuestionables independientemente del resultado que todo ello tenga al final en mayo, cuando los resultados de las urnas den y quiten razones.

El primero de ellos es el que se refiere a la fidelidad. Se dice que los votantes del Pepé son los más disciplinados del panorama político español y también que ese carácter fue heredado de los tiempos en los que FAC era secretario del partido. Sin embargo es curioso observar cómo ha sido él mismo el primero en romper la disciplina en el momento en que las cosas se le han torcido y no pintaron como preveía. Por mucho que pueda afirmar que el motivo de la espantada está en el hecho de que el Comité de Garantías y la cúpula del partido hayan permitido que se le insultase desde la dirección asturiana. Pues haberse ido entonces, sin esperar a la fumata. Lo cierto es que FAC se dio de baja en el partido porque su dirección no le eligió y no porque le hayan llamado sexagenario (que es cierto) o extraterrestre. Calificativos peores le cayeron en su época activa y, aunque le hayan molestado, no por ello la abandonó o solicitó el amparo de la dirección. La segunda cuestión tiene que ver con la postura adoptada desde Oviedo por la dirección regional a lo largo de todo este tiempo. Si en un primer momento estaban de acuerdo en la nominación de exministro, no es de recibo que luego cambien de opinión y, además, arremetan contra él demonizando toda su trayectoria política cuando siempre fue el santo y seña de su formación. En definitiva, si al principio era el mejor no se comprende que de pronto pase a convertirse en un bicho con cuernos y rabo.

De todas formas ambas partes sabrán lo que se hacen y habrán estudiado bien sus estrategias. Lo que de todo ello trasciende a la opinión pública, lo que leemos aquí o vemos en los telediarios al final será lo menos importante porque no nos cabe la menor duda de que unos y otros ocultan algún as en sus mangas que podrá entrar en juego en cualquier momento de la contienda. A lo mejor hasta se reconcilian y se dan un beso.
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viernes, 7 de enero de 2011

CAPÍTULO VI: EL DESCORCHE


Y es que esta historia ha empezado a escribirse hace casi dos años. Por nuestra parte hemos dado cuenta de alguno de sus episodios en cinco ocasiones, siempre desde nuestro profano y particular punto de vista (ya ven “p” y “p”, igual a pura coincidencia). Por eso éste es el sexto capítulo que lanzamos desde el mismo punto. Esperamos al 22 de mayo para ponerle título, aunque el desenlace probablemente no se podrá asegurar hasta pasados unos años. Como suponemos que ustedes ya están en situación les evitaremos todo tipo de repasos acerca de la fermentación de la culebra, de su conversión en culebrón, de los dimes, diretes, las noticias oficiosas y oficiales, los desvaríos de unos y otros, y la madre que los va a parir a todos ellos.

Primer descorche. Génova hace público el nombramiento de Isabel Pérez Espinosa (en adelante IPE -por ahorrar espacio-) como candidata a la presidencia del Principado (observen las “pes”) por el Partido Popular, dejando a Francisco Álvarez Cascos (FAC, en el futuro -no le vamos a gastar el nombre-) y a su troupé de seguidores con un palmo (otra vez la “p”) de narices, cuando todos presumían que sería Paco el elegido. Poca potencia en el descorche, quizás no debería de haber sido éste el día elegido para algo tan esperado. Cuando se están repasando las noticias del año que termina. Las burbujas salen débilmente de la botella, como con miedo. Hasta que de pronto, se escucha un segundo descorche. Más potente y más sonoro. “Paco se pira del Pepé”. Y al día siguiente Pelayo hace lo propio (maldita “p”) y la mandakari de Peñamellera Alta anuncia que también se irá cuando proceda, mientras el baranda de Pola de Siero dice que donde dije digo…, ya saben, y parece que permanece pegado a la poltrona a la que se ha subido hace poco. Será que no ha tenido tiempo a cogerle el gusto. Desconocemos aún que harán los Pedros, Pablos y Paulinos del partido, así como los sátrapas de Ponga, Parres y Piloña, y las demás Polas de la geografía astur, incluida la del Tordillo. Del otro lado Pilar Pardo y otros también se descuelgan para decir lo suyo. Ya ven, se nos ha pegado la “p”. Mierda. Pues punto y aparte.

Así es que unos y otros, con el beneplácito de quienes deberían de haberlo impedido, han conseguido desatar la tormenta perfecta. Unos contra otros, los partidarios de Paco contra los de IPE y Gabino y contra la cúpula nacional. Todos contra todos, y el digital que echa humo. Hace tiempo que lo habíamos dicho: “No hay peor cuña que la de la misma madera”. Y en todo este maremagnum de insultos, acusaciones, descalificaciones y la que te rondaré morena, sólo una voz dentro del grupo ha sido lo bastante atrevida para llamar a todos a la cordura. Alberto Ruiz Gallardón ha pedido a todos un poco de reflexión y sensatez, al tiempo que otro alcalde popular, el de Valladolid, refiriéndose a la ministra Pajín por el tema del fumeteo asegura que incitando a la acusación es como han empezado muchos conflictos. Más madera, que están los tiempos para estas batallas. País.

Continuará…

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